El año pasado, Red Hat presentó Nova, un controlador de código abierto basado en Rust para GPUs de NVIDIA, diseñado como sucesor de nouveau. Nova promete simplificar la arquitectura de los controladores de GPU y es compatible con una amplia gama de hardware, comenzando con las tarjetas RTX 2000 y versiones más recientes. A pesar de la introducción de Nova, los usuarios tendrán la opción de continuar utilizando nouveau debido a su coexistencia en el ecosistema de controladores de Linux, especialmente útil para aquellos con GPUs más antiguas.
Recientemente, Danilo Krummrich de Red Hat presentó una solicitud de extracción para incluir el componente inicial de «nova-core» y la documentación del proyecto en la próxima versión del núcleo de Linux 6.15. La solicitud de extracción fue acompañada de un mensaje dirigido a algunos de los principales mantenedores del núcleo, señalando que además del esqueleto del controlador, se incluyeron dos parches de firmware y un parche de Rust como dependencias.
Este avance, aunque significativo para el desarrollo de Nova, aún se encuentra en una etapa temprana. El controlador presentado es un prototipo básico que no está listo para el uso general o en producción. No obstante, se espera que este paso sea el primero de muchos que integrarán al controlador en el núcleo, a medida que madure.
La inclusión de Nova en el núcleo de Linux aún depende de la aprobación de Linus Torvalds y otros mantenedores responsables. Una vez que sea aprobado, los propietarios de GPUs NVIDIA estarán más cerca de contar con una alternativa potente tanto a nouveau como al controlador gráfico propietario de NVIDIA, ofreciendo así más opciones a los usuarios de Linux.
Este desarrollo ocurre en un contexto más amplio donde la comunidad Linux busca equilibrar la innovación tecnológica con políticas que aseguren la estabilidad y seguridad del núcleo, particularmente en torno al uso del lenguaje Rust en el ecosistema de Linux.
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