Un notable avance ha ocurrido en PayU, la afamada entidad financiera regulada en India, que responde al creciente interés de sus empleados por la inteligencia artificial (IA) generativa. Esta tecnología ha sido rápidamente adoptada por los equipos de la empresa para resolver problemas técnicos, redactar correos electrónicos y adaptar contenido al inglés para distintos tipos de comunicación. Sin embargo, esta tendencia también ha generado preocupaciones dentro del equipo de Seguridad de la Información de PayU. La empresa se alarmó ante la posibilidad de que se estuvieran enviando y procesando datos sensibles, como información de sistemas internos, detalles de clientes y documentos regulados, a proveedores de IA externos.
En respuesta a esta situación y reconociendo la importancia de la privacidad de los datos en el sector financiero, PayU optó por restringir el acceso a herramientas públicas de IA generativa. Aunque esta medida era necesaria para protegerse de posibles filtraciones de datos y violaciones regulatorias, también subrayó la necesidad de contar con una alternativa segura y normativamente alineada que permitiera aprovechar las ventajas de la IA generativa sin comprometer la seguridad.
La solución llegó con Amazon Bedrock, un servicio totalmente gestionado que proporciona acceso a múltiples modelos de base de líderes del sector. Al implementar esta plataforma, PayU ha logrado democratizar el acceso a la inteligencia artificial, asegurando al mismo tiempo que toda la información se mantenga dentro de su nube privada en India. Esto garantiza que los datos permanezcan bajo control, reforzando así su seguridad y privacidad.
Esta nueva arquitectura tecnológica no solo mejora las tareas cotidianas como la redacción de correos electrónicos o el análisis de datos económicos, sino que también facilita una interfaz de lenguaje natural, permitiendo a los empleados acceder a información vital para el negocio mediante interacciones conversacionales. Asimismo, se ha desarrollado un sistema de control de acceso basado en roles, asegurando que solo los usuarios autorizados puedan acceder a información sensible.
Desde la implementación de esta infraestructura, la empresa ha visto un incremento del 30% en la productividad de su equipo de analistas. La colaboración entre los departamentos y el equipo técnico ha impulsado iniciativas de transformación digital, fomentando una cultura de innovación y aprendizaje continuo en toda la organización.
Las medidas adoptadas por PayU no solo garantizan la seguridad de la información, sino que también abren el camino hacia una nueva era donde la inteligencia artificial es integrada efectivamente en el proceso de toma de decisiones empresariales, mejorando la eficiencia y el enfoque estratégico de la compañía.