Flock es un navegador muy atractivo y sobre el que se ha montado mucho revuelo, pero a la hora de la verdad, he tardado un par de horas en deshechar su uso. La facilidad para bloggear y su interfaz revolucionaria que prometían no era tal, y parece que Flock no está alcanzando las cotas de mercado que podrían haberse esperado.
Quizá por esto es por lo que Bart Decrem, antiguo CEO de Flock, ha abandonado el barco para crear otra empresa, aunque diciendo que «no hay nada malo con Flock«. Lo único que podía haber salvado a Flockr era su alianza con Photobucket (conociendo el enorme uso que tiene en MySpace), pero la marcha de Decrem parace indicar que esto no ha ocurrido.
Vía Mashable!