Hoy en día, hablar de problemas de ocupación en los dispositivos electrónicos es algo que no tiene mucho sentido gracias a las altas capacidades de almacenamiento que nos ofrecen, pero aún así hay ocasiones en que el tamaño no es todo lo grande que quisiéramos y es necesario utilizar técnicas para reducir la ocupación, siendo la más habitual la compresión de los archivos.
El uso de la compresión de datos era muy habitual hace unos años cuando los dispositivos tenían poca capacidad de almacenamiento, dispositivos que en ocasiones sólo utilizaban discos flexibles para el almacenamiento de la información o equipos que traían discos duros de varias decenas de megas. Por suerte los dispositivos que podemos adquirir en portales como http://www.olx.com.py ofrecen una capacidad mucho mayor.
La compresión de datos ofrece una mayor comodidad a la hora de transportar la información. Para lograr reducir el espacio que ocupan, se hace uso de complejos algoritmos que buscan ciertos patrones repetidos en las cadenas que son sustituidos para reducir el número de bits utilizados.
En el proceso de compresión de datos nos podemos encontrar con dos tipos de algoritmos utilizados en este proceso.
Por un lado está la compresión sin pérdida de datos, donde los algoritmos buscan poder recuperar la información tal y como se la encontraron antes de realizar la compresión, sin ningún tipo de pérdida. Este tipo de compresión se utiliza sobre todo en la compresión de texto.
Por otro lado nos encontramos con los algoritmos con pérdida de información, que son aquellos que una vez que se descomprime la información, ésta ha sufrido algún tipo de pérdida, aunque la información sigue siendo totalmente legible para el usuario. Estos son los que utilizan algunos problemas de reducción de tamaño de las imágenes. Este método permite conseguir mejores ratios de compresión.
¿Utilizas habitualmente algún tipo de compresión de datos?