El gigante español de las telecomunicaciones, Telefónica, afirmó hace pocas semanas que ralentizaría el despliegue de fibra óptica por el territorio nacional debido a discrepancias con la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia, ya que les obligaba a ceder sus infraestructuras al resto de operadores que ofrecen servicios en nuestro país. A pesar de esta decisión, la compañía sigue trabajando en otros sectores de la fibra óptica para mejorar su calidad de señal. Entre estos trabajo estaba la de mejorar la interconexión de sus redes de larga distancia por medio de mallas fotónicas, cuyas primeras pruebas han concluido con éxito.
Telefónica quiere estar a la vanguardia de la tecnología utilizada en sus servicios y entre sus principales objetivos están la de garantizar la seguridad en la red en caso de caídas. Para ello ha diseñado un sistema en el que divide la red fotónica mallada en dos dominios independientes, cada uno suministrado por una compañía distinta como es Alcatel-Lucent y Huawei con la intención de que en caso de caídas, el servicio se pueda recuperar de forma automática.
Las primeras pruebas se han realizado en una red de 1.000 kilómetros que conectaban Huesca con Madrid con una red que ofrecía 10 Gbps. Para la prueba se ha utilizado equipos 1830PSS de Alcatel-Lucent y OSN x800 de Huawei con los que se ha podido comprobar que en caso de caídas, el servicio seguía funcionando hasta lograr su recuperación total de forma automática.
Según la compañía, esta prueba de interconexión constituye un aspecto clave para la futura evolución de las mallas fotónicas para que en un futuro se pueda restaurar circuitos que atraviesan diferentes dominios de mallas fotónicas de diferentes proveedores. Un aspecto que hay que tener en cuenta para mejorar las velocidades que se manejan actualmente y las que se manejarán en un futuro próximo.
Vía: Adslzone
