Tipos de curriculum vitae que podemos utilizar a la hora de buscar trabajo

Encontrar el puesto de trabajo deseado no es fácil. No solo sirve con tener una excelente formación, una buena trayectoria profesional o elaborar un buen documento de presentación. Además de cumplir con los requisitos pedidos para el puesto, debes conseguir destacar sobre el resto de candidatos. Aunque parezca una misión complicada, hoy en día es posible utilizar plantillas de curriculum que nos pueden ayudar a conseguirlo, plantillas que podemos utilizar para elaborar alguno de los tipos de curriculums más utilizados. Hoy haremos un repaso por los principales tipos y que puede ofrecer cada uno de ellos.

Curriculum Vitae cronológico

curriculum vitae

Se trata del tipo más común y el más utilizado en la actualidad a la hora de solicitar un puesto de trabajo. A la hora de realizar este documento, será necesario empezar haciendo una lista de nuestro historial de puestos de trabajo, colocando la experiencia más reciente en primera posición. A partir de ahí, iremos colocando el resto en orden cronológico inverso.

De forma habitual, las empresas prefieren este tipo de hoja de vida porque para ellos resulta más fácil los trabajos realizados y cuanto tiempo hemos estado en cada uno de ellos. Suele funcionar bien para aquellos trabajadores que tienen una historia de trabajo más o menos sólida.

Un CV cronológico utilizaría la siguiente estructura:

  1. Datos personales y fotografía
  2. Historia de trabajo en orden cronológico inverso.
  3. Estudios cursados (títulos universitarios, grados, másters…)
  4. Otra información (idiomas, disponibilidad para viajar, carnet de conducir…)
  5. Intereses

Curriculum vitae funcional o temático

Este otro tipo de curriculum tiene como principal característica que se centra en nuestras habilidades y experiencia, en lugar de mostrar un historial de nuestro trabajo. La información está distribuida por tema, proporcionando un conocimiento rápido de nuestra formación y experiencia en un determinado ámbito. Se centra en nuestras capacidades y habilidades más que en nuestra experiencia laboral o formación.  No sigue una progresión cronológica, permitiendo de esta forma seleccionar nuestros puntos fuertes, destacando nuestras habilidades y logros, y omitir o difuminar los no deseados.

Si se quiere, se puede incluir una lista concisa de nuestro historial de trabajo en la parte inferior del documento. Suele ser muy habitual en aquellas personas que están cambiando de carrera o que tienen lagunas en su historial de empleo. También resulta muy útil en aquellos casos en los que la persona es nueva en un determinado tipo de trabajo o tienen una experiencia laboral limitada.

A la hora de su estructuración, se suele empezar poniendo de relieve los logros, habilidades y cualidades personales. A continuación se indican una sucesión de secciones, cada una relacionada con una habilidad o capacidad diferente. En lugar de centrarnos en un trabajo en particular, se hará describiendo la experiencia en su totalidad.

Curriculum vitae combinado

Este tercer tipo del que os vamos hablar, es una mezcla de los dos anteriores. En la parte superior del CV, se mostraría una lista de nuestras capacidades y cualificaciones. Por debajo de esta, se incluiría un historial de trabajo ordenado cronológicamente. Aquí hay que destacar que esta segunda sección no debería ser el foco de atención del curriculum, por lo que no debería ocupar mucho espacio.

Gracias a este modelo, es posible resaltar las habilidades más relevantes para el puesto de trabajo que estamos solicitando, a la vez que mostramos información sobre nuestro historial. No hay que olvidar que la mayoría de las empresas quieren ver nuestro historial de puestos de trabajo, aunque este no sea muy extenso.

Un CV combinado sigue tanto el formato cronológico y funcional, lo que hace un poco más largo el CV de lo normal. Sin embargo, sí ofrece lo mejor de ambos tipos de CV y ​​se está convirtiendo en una estructura más popular el uso.

Curriculum vitae no tradicional

curriculum vitae diferente

El último de los tipos del que vamos hablar es una versión diferente de lo que estamos acostumbrados a ver, incluyendo en él fotografías, vídeos, gráficos y otros elementos visuales. Aquí entra en acción nuestra imaginación, pudiendo ser desde un vídeo hasta una infografía o una página web.

Suelen ser la mejor opción para aquellos puestos de trabajo donde se buscan a gente creativa, ya que es un medio más de mostrar lo que podemos ser capaces de hacer.

Una vez conocidos estos tipo, ¿cuál pensáis que puede ser el más efectivo?

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