La polÃtica de Microsoft respecto a los estándares ha variado mucho con el tiempo, hay que reconocerlo. Hace años intentaban manipular directamente las implementaciones para favorecer sus propios productos y tecnologÃas. Desde hace un tiempo, al darse cuenta de que esa estrategia les ha perjudicado en más de una ocasión, han empezado a adoptar fielmente la mayorÃa de tecnologÃas desarrollada por la industria.
Y es que nadie puede negar que parte de la gran pérdida de cuota de mercado de uno de los productos estrella de Microsoft, Internet Explorer, se debe entre otras cosas a su lamentable soporte de estándares web. Una carencia absurda que durante años lastró la evolución tecnológica de la Web y ayudó a perpetuar a Microsoft en su estatus de monopolio. Sin embargo, la competencia surgió de donde menos se la esperaba: las cenizas de Netscape en forma de Fundación Mozilla.
Gracias al empuje de Mozilla pudimos disponer de una solución neutral, multiplataforma y libre que se empeñaba una y otra vez en implementar los estándares por poco que le gustasen a Microsoft. Al final, los desarrolladores web y la industria no pudieron obviar su existencia y el apoyo creció hasta tal punto que IE se quedó atrás de forma irremediable.
Os invito ahora a hacer un poco de memoria respecto a la relación de Microsoft, Internet Explorer y los estándares o tecnologÃas neutrales en la Web.
En 1996 se publicó Internet Explorer 3.0 con una importante novedad: soporte de controles ActiveX, una tecnologÃa que permitÃa desarrollar pequeñas aplicaciones distribuidas creadas para ser incluidas dentro de páginas web, añadiendo asà grandes posibilidades de interactividad.
Se trataba de la respuesta propietaria de Microsoft a los applets de Java, una tecnologÃa neutral de SUN que por la época irrumpÃa con fuerza y que podrÃa ejecutarse en cualquier navegador y sistema operativo soportado por la plataforma. Por su parte, ActiveX estaba construido sobre el modelo de componentes nativo de Windows y únicamente funcionaba en los sistemas operativos y navegadores de Microsoft.
En 1999 nació SVG como un estándar abierto que hacia posible crear animaciones y gráficos vectoriales con capacidades de interactividad de forma nativa en los navegadores sin requerir plugins de terceros. Todos los principales navegadores lo implementaron rápidamente excepto (adivinad) Internet Explorer.
Microsoft optó por seguir con su propio «estándar» de gráficos vectoriales VML que habÃa creado junto con un puñado de empresas afines en lugar de adoptar la solución desarrollada por la W3C con la participación de toda la comunidad. Ahora, casi diez años después del nacimiento de SVG, Internet Explorer 9 lo implementa por primera vez.
Como resultado SVG nunca pudo usarse de forma masiva porque el navegador mayoritario no lo soportaba y la creación de gráficos vectoriales en la Web se dejó en manos de una tecnologÃa propietaria como Flash. Esto fue una solución práctica al problema de fragmentación tecnológico que provocó (entre otros factores) una gran dependencia hacia esa tecnologÃa de Adobe (antes Macromedia).
Estos son únicamente un par de ejemplos de la forma de entender la Web históricamente por parte de Microsoft. Un historial turbulento y en realidad mucho más amplio que ha perjudicado a la innovación en la Web, fragmentando la experiencia de usuario y favoreciendo a sus productos como prioridad.
Llegamos a 2011. Desde hace tiempo viene desarrollándose un estándar muy importante que permite llevar la Web al siguiente nivel: gráficos 3D soportados por los navegadores web sin requerir plugins e integrados dentro del elemento <canvas> de HTML5. Se trata de WebGL, un estándar mantenido por Khronos Group y en cuyo grupo de trabajo colaboran Apple, Google, Mozilla y Opera.
No forma parte del conjunto de estándares HTML5 propiamente dicho, es cierto. Pero se trata de una de las tecnologÃas clave para liberar la Web por fin de soluciones cerradas como Flash que hacen que todos los usuarios de Internet dependamos de una empresa para disfrutar de una experiencia web rica e innovadora. El 3D nativo en la Web es un paso realmente significativo en la experiencia de usuario.
Por otro lado, el reciente lanzamiento de Internet Explorer 9 del pasado 14 de marzo supone una gran noticia. Se trata de un importante paso de Microsoft en la dirección correcta. Servirá, sin duda, como un importante estÃmulo para el desarrollo de la Web. No tendremos que preocuparnos por las carencias de un navegador que sigue siendo el más usado a dÃa de hoy.
IE9 es rápido, mucho más seguro, tiene un bonito y simplificado interfaz e implementa todos los estándares y últimas tecnologÃas web para tener una experiencia de navegación completa y moderna como usuario de Windows. ¡Un momento! ¿Todos? No, todos no. No hay ni rastro de WebGL en IE9.
Mientras tanto, los principales navegadores de la competencia llevan tiempo adoptando esta tecnologÃa y trabajando en su implementación (Opera, Safari, Chrome y Firefox lo soportan actualmente).
Microsoft regresa a los errores del pasado, vuelve a poner por delante sus inmediatos intereses comerciales sin tener visión de futuro. ¿Por qué no está soportado WebGL en IE9? Mucho tiene que ver el hecho de que sea un estándar basado en OpenGL, el competidor directo de Direct3D, la solución propietaria de Microsoft para crear gráficos en tres dimensiones.
No serÃa de extrañar que a lo largo de 2011 veamos como la compañÃa de Redmond lanza una nueva tecnologÃa de gráficos 3D en la Web, soportada por IE, implementada sobre Direct3D que utilice incluso el mismo elemento <canvas> modificado de HTML5. Una solución que únicamente funcionaria sobre sistemas operativos Windows y en Internet Explorer.
De nuevo podrÃamos ver como una tecnologÃa neutral que implica un gran avance para la Web se ve torpedeada por Microsoft en contra de sus propios usuarios.