Android Wear el sistema operativo para relojes

Los dispositivos wearables son están a la orden del día. Hoy más que nunca. Y es que son muchas las marcas que están sacando pulseras y relojes inteligentes. Los relojes casi más listos que nosotros, están de enhorabuena porque Google ha creado Android Wear, el sistema operativo oficial para relojes inteligentes.

La empresa Sundar Pichar es la que ha anunciado el diseño del sistema operativo diseñado específicamente, única y exclusivamente para relojes inteligentes. ¿Cómo te quedas? Ya serán muchos como los dispositivos de LG y Motorola los que portarán esté sistema operativo.

Hace una semana ya adelantaron un kit de desarrolladores enfocado a este tipo de dispositivos, pero no un sistema operativo hecho y derecho. La empresa asegura que los smartphones son solo la cúspide de la tecnología móvil, y las cúspides a parte de bonitas son bastante pequeñas. Por ello muchas empresas están emocionadísimas con estos dispositivos “llevables”, porque se puede interactuar con ellos de manera más sencilla.

Este sistema operativo Android Wear ofrece cuatro opciones en los dispositivos: una parte de información útil cuando sea necesario, dirigir preguntas a través del comando voz, monitorear, controlar y registrar los factores de salud y condición física y jugar con la tecnología multipantallas. ¡Lo tiene todo! Y además para dispositivos relativamente pequeños, recordemos que se trata de relojes; inteligentes, sí, pero relojes.

Ya se puede descargar una versión preliminar o beta para los desarrolladores que estén enfocando su trabajo al mundo de los dispositivos wearables  para que puedan ir adaptando sus aplicaciones al sistema operativo que sale al mercado dentro de poco.

Ya son muchas las marcas de relojes inteligentes que están trabajando en este sistema operativo, y es que es una pasada poder contar con un sistema tan completo en un dispositivo tan pequeño. Android Wear es el sistema operativo para relojes inteligentes. Pronto podremos probarlo en nuestros dispositivos. ¿Cumplirá con las expectativas tan altas que nos acaba de dejar?