Al respecto de lo que os comentamos la semana pasada, parece ser que la propuesta que tanta polvareda ha levantado en la red no es como parecÃa. De hecho, tal propuesta no existe, y lo que se sirvió a la prensa fue algo que no se habÃa reflexionado lo suficiente, y se comunicó por error.  La explicación proviene de uno de los tres diputados impulsores de dicha propuesta -repito, que ahora dicen que no existe en firme- y la autenticidad de su autorÃa y la clarificadora explicación la podéis leer completa aquÃ. A la postre, unos borradores con tachones, las prisas y la falta de tiempo y coordinación, motivaron a que se presentase algo que, oficialmente no existe. Bien por los populares porque dicen, literalmente, que metieron la pata; reconocen el error como suyo, se disculpan, y a otra cosa…
Pues no; a otra cosa, no. Y no, porque el hecho de que hayan hecho público por error en base a unos borradores implica que a nivel de despachos eso sigue en pié. Puede que en unos documentos no oficiales, puede que a nivel de conversaciones de sobremesa, puede que en la mente de algun diputado. Pero a mi entender, la intención de prohibir las redes sociales a menores sigue ahÃ, de lo contrario, jamás se hubiera plasmado en un borrador.
Por otra parte me está gustando comprobar como los grandes medios que convirtieron dicha propuesta en su particular caballo de batalla para demonizar una vez más las redes sociales, recordando con todo lujo de detalles las demasiadas muertes que se han cobrado estos sitios, todavÃa es hora que rectifiquen como lo ha hecho el PP.
El desconocimiento, la ignorancia y el ansia de control mediante técnicas que no tienen cabida a estas alturas, siguen en en el orden del dÃa, y es ahà donde por lo visto no caben términos como, por ejemplo, educación.