Todos sabemos que cada compañía del mundo tech, tiene sus manías. Y a la de la manzana se le suele achacar precisamente su excesivo criterio para seleccionar quién está dentro y quién no. Y como puede que muchos se estén liando, vamos a contar esta historia desde el principio. Pues resulta que una empresa con financiación de starup consiguió lanzar un proyecto en el que diseñaban un cargador de baterías que se podía conectar a casi cualquier terminal, incluidos los nuevos dispositivos Apple que funcionaban con el cargado Lighning. Hasta aquí todo bien.
Pero ni la expectación que consiguieron, ni el apoyo masivo de usuarios e inversores pudo derrumbar la pared montada por Apple que le negó el uso de su licencia para que el dispositivo pudiera ser compatible con el concetor. ¿El porqué? No importa porque al ser un conector propio la compañía puede decidir en última instancia quién lo usa y quién no, y de ahí nuestra primera afirmación al comenzar el post.
En fin que al final la gran idea de POP se convirtió en el cargador para terminales Apple que no pudo ser por Apple. Y la conclusión de esta historia es que es mejor no buscarse problemas con Apple, que ya ven como acaban. En un verdadero desastre…